La moción conjunta de los grupos municipales de Ganar Móstoles, Socialista e Izquierda Unida Comunidad de Madrid-Los Verdes para que el Ayuntamiento de Móstoles inste al Ministerio del Interior y al Consejo General del Poder Judicial a la no aplicación del falso síndrome de alienación parental (SAP) ha sido defendida en nuestro grupo por parte de la concejala Beatriz Mogrovejo Gil. El texto de defensa de la moción es el siguiente:
«Gracias Sr. Presidente, buenos días a todos y todas.
Ante de comenzar esta intervención quiero saludar de forma muy especial a activistas de Asociaciones de Mujeres que nos acompañan hoy, como es Móstoles Feminista, Asociación Nosotras en el Mundo, y principalmente a Susana Guerrero, mujer afectada por un dictamen de sentencia en base al Síndrome de Alienación Parental.
Susana ha estado a punto de perder la custodia de su hija Naiara, de 10 años de edad, porque se negó a que el padre de la niña disfrutara de un régimen de visitas cuando descubrió que este abusaba de ella. Por ello, Susana fue llevada a juicio, y obtuvo como sentencia la retirada de la custodia de la niña a favor del padre, y fue así porque la jueza determinó que Naiara sufría un síndrome llamado de Alienación Parental.. Afortunadamente la sentencia ha sido revocada y Naiara está junto a su madre.
El caso de Susana, por haber sido una luchadora y haber llevado su caso hasta los medios, ha puesto encima de la mesa un problema que viene sucediendo desde hace años y que, muy a nuestro pesar, va creciendo y cobrando una credibilidad muy peligrosa, pues pone en riesgo a niños y niñas. La aplicación de este falso síndrome, dándole una validez que no tiene, está otorgando custodias a padres pedófilos, padres violentos o ambas cosas a la vez, es machista y anula la correcta investigación de los casos.
Ojalá el reglamento interno de Móstoles permitiera hablar a Susana y fuera ella misma quien nos explicara su caso. Yo lo conozco pues he seguido de cerca su lucha y la he escuchado en diferentes ocasiones en medios de comunicación y se del calvario por el que ha pasado. Desde los ejemplos en primera persona se entienden las cosas de una forma mucho más clara, nos tocaría el corazón y se entendería la magnitud y la gravedad de la aplicación del SAP para dictar sentencias.
Para quien no haya escuchado hablar de Síndrome de Alienación Parental, y para que entiendan qué es exactamente lo que estamos pidiendo en esta moción, decirles que este falso síndrome afirma que los hijos han sufrido un lavado de cerebro por parte de uno de los cónyuges tras la separación o el divorcio, y que es por eso por lo que odian al otro cónyuge y no quieren ir con él. Generalmente es la madre la que “lava el cerebro”, y es el padre el odiado. De hecho antes se llamaba “Síndrome de la Madre Maliciosa”.
Los abogados, psicólogos, jueces y juezas que entienden que este síndrome es real y le avalan, entienden de una forma perversa que un niño o niña puede verse afectada por él, y en base a ello consideran falso su testimonio, pues consideran que estos están enajenados de la realidad, no dando lugar siquiera a que puedan existir causas válidas que justifiquen este rechazo.
Es por eso que se están quitando custodias a favor del otro progenitor sin haber una investigación que compruebe cuáles son las causas reales que han provocado el rechazo del hijo o hija hacia su padre, y esto beneficia a los padre pedófilos que han encontrado la puerta por donde burlar la justicia, desde luego, la jugada de Richard Gardner, el inventor del SAP, era una jugada maestra. Si investigamos un poco sobre este señor, descubriremos su pasado pedófilo y su sospechosa historia, no solo logró convencer con su teoría a jueces y abogados, sino que se lucró de ello durante más de 30 años y dejó un legado editorial sobre su teoría. Ejerció como perito en cientos de litigios de custodias basándose en su invento, poniendo al servicio de hombres maltratadores y abusadores sexuales de niños y niñas el diagnóstico que había inventado.
El SAP no existe, la comunidad científica lo ha rechazado sistemáticamente por no cumplir los mínimos para considerar que sea un síndrome y menos aún un trastorno o enfermedad mental catalogado de forma diagnóstica.
Los casos se multiplican y es por eso que hay que poner el debate encima de la mesa y ponerle freno.
La Federación de Mujeres Separadas y Divorciadas, la Federación de Mujeres Progresistas, La Asociación de Mujeres Juristas Themis, La Asociación Universitaria contra la Violencia Machista, la Asociación “Nosotras en el mundo” y otras tantos colectivos feministas, llevan años denunciando estas prácticas y sacando a la luz multitud de casos de custodias concedidas a padres violentos o padres abusadores por el que más de un juez o jueza debería perder el sueño.
No hay nada mejor para defender lo indefendible que inventarse un síndrome, curiosamente contra la mujer, y lo que es peor, contra los niños o niñas.
Hace tan solo unos días la Asociación Infancia Libre, a raíz de una noticia que todas habremos escuchado de una niña que con una grabadora guardada en el calcetín por fin logró demostrar que su padre abusaba de ella porque nadie la creía, denunciaba que en menos de un año han detectado casi un centenar de casos de niñas y niños, que habiendo denunciado abusos por parte del padre, no han sido creídos y por tanto han tenido que seguir manteniendo contacto con sus agresores.
Si la madre se niega a estas visitas, denuncia que sus hijos e hijas están sufriendo abusos por parte del padre y el padre contra denuncia diciendo que miente, existe un alto riesgo de que las declaraciones de los niños no sean tenidas en cuenta por aplicarles este falso diagnóstico. No digo que siempre sea así, digo que las estadísticas dicen que se aplica cada día más.
No es normal que no se crea a los niños y niñas, y no es normal que no se crea a la madre y que se considere que todo es un invento sin investigación.
España, junto con Argentina y Estados Unidos, ha adoptado este falso diagnóstico y se habla de él con naturalidad y con credibilidad. Son numerosas asociaciones de hombres que son férreos defensores del mismo, porque es un invento que les beneficia; estos señores no tienen en cuenta a la Organización Mundial de la Salud, que dice que tal síndrome no existe, al Consejo General del Poder Judicial, que recomiendan que no se use, a la Asociación “Save the Children”, que califica de preocupante su uso por conllevar desprotección a los menores, o a la Asociación Española de Neuropsiquiatría, que califica al SAP como un “grave intento de medicalizar lo que es una lucha de poder por la custodia de un hijo” . De hecho esta última dice también que tiene un claro sesgo de género, pues la mayoría de los cónyuges “alienadores” son mujeres, si esto no es machismo, díganme qué es.
Charo, víctima de violencia de género, denunciante de su pareja y con orden de alejamiento, ha perdido la custodia de su hija pequeña y es ella la que cuenta con un régimen de visitas vigilada: la sentencia fue en base a que la madre mentía y la niña sufría Síndrome de Alienación Parental. Charo tenía informes médicos que adviertían de posibles abusos sexuales por parte del padre, y sin embargo la custodia la tiene el padre.
Puedo hablar también de Inmaculada, que ha perdido la custodia de sus dos hijas aun habiendo declarado la mayor de estas que no quería ir con su padre porque le tenía miedo, porque le había visto pegar muchas veces a su madre y no quería ir con él. Este hombre tiene una petición por el fiscal de 5 años de cárcel por una paliza propinada a Inmaculada y sin embargo goza de la custodia de sus hijas.
Antes de ayer un hombre apuñaló a su ex mujer en presencia de su hijo de 5 años en un punto de encuentro. María Salmerón, de Sevilla, está a punto de ingresar en prisión por negarse a cumplir el régimen de visitas que un juez otorgó a un padre maltratador. ¿Qué está pasando con las custodias y los régimen de visitas? ¿Cómo es posible que esto esté sucediendo? ¿Es esto un país desarrollado y de iguales?
Un hombre violento no puede ser un buen padre. Y repito. No puede ser un buen padre, y mientras que la sociedad siga diciendo que un maltratador puede ser malo como pareja pero puede ser el mejor de los padres a la vez, no erradicaremos la violencia de género ni nos mostraremos ante ella como nos debemos mostrar, seguiremos siendo tolerantes ante lo que tenemos que tener tolerancia cero.
A mí personalmente, como a toda mujer que se considere feminista, me indigno profundamente cuando escucho estas afirmaciones, porque no es posible: un hombre violento no puede ser buen padre, una niña que afirma que su padre le toca, no miente. ¿O si lo dice tiene que considerarse que está alienada? Una madre que se niega a entregar a su hijo a un señor que la ha pegado, aunque un juez haya determinado que le visite, porque este le tiene miedo, no está enferma, está protegiendo a sus hijos. ¿O es que lo haríamos cualquiera de nosotras? ¿Estaríamos enfermas si no dejamos que nuestros hijos estén con alguien al que tienen miedo con causas justificadas porque nos ha maltratado delante de ellos?
Y digo todo esto por el debate abierto sobre las sentencias compartidas impuestas, de las que ya hablaremos en este espacio puesto que la Comunidad de Madrid pretenden sacarlo adelante.
Es hora de hablar clarito, aquí lo que hay por debajo es un problema de patriarcado, de desigualdad, de querer saltarse los avances de los derechos que las mujeres han ido adquiriendo, de un sistema profundamente machista que se siente amenazado, que siente miedo ante la posible pérdida de poder y es por eso que en base al compromiso que este ayuntamiento tiene por la igualdad, y nuestro grupo concretamente con la lucha feminista, instamos al Consejo del Poder Judicial que sea garante de sus propias recomendaciones, al Ministerio de Interior para que fuerce la retirada de los carteles explicativos sobre el falso SAP en las Dependencias de los Cuerpos de Seguridad: es aberrante que estos carteles estén expuestos en espacios donde las mujeres víctimas de violencia deben declarar, y por último dar traslado al Congreso de los Diputados, a la Asamblea de Madrid y al Ministerio de este acuerdo en pro de la justicia, la igualdad y la protección a los menores.»
La segunda intervención de nuestro grupo es la siguiente:
«Gracias de nuevo Presidente.
Después de la defensa que he hecho en mi primera intervención, quiero decir que puede ocurrir, y de hecho ocurre, que cuando hay malas separaciones, las diferencias de pareja influyan negativamente sobre los hijos e hijas, Los adultos pueden hacer afirmaciones sobre el otro progenitor que haga que los niños y las niñas se sientan confundidos, no solo por la separación en sí misma, que ya es un trauma, sino por la manipulación a la que pueden estar siendo víctimas por parte de sus progenitores.
Es normal que un niño o niña no sea capaz de entender un cambio de familia, rompe con su rutina y pueden sentir abandono y esto les puede confundir y provocar rechazo. Yo he vivido una situación así con una persona muy cercana. Pero para esto lo que hay que hacer es manejarlo bien, no adoptar diagnósticos inventados por pedófilos que no tienen aval ninguno. Hay que estudiar las circunstancias, descartar lo primero que no haya negligencia, abusos o malos tratos y posteriormente intervenir.
Si lo que hay es manipulación, lo que hay que hacer mediación, poner a disposición de estos casos, psicólogos y equipos que aborden la situación. Hay muchas razones por la que un progenitor puede pelear por la custodia de sus hijos o hijas, y no solo tiene que ser el amor que se siente por ellos, del que no dudo (todos los maltratadores aman a sus esposas) y también hay muchas razones por las que los niños pueden llegar a rechazar a su padre o su madre, como puede ser la falta de implicación en la crianza, la ausencia de vínculo, etc, etc… o sí, también derivado de una manipulación, pero si es así esto es detectable y es abordable. Lo que hace falta es inversión económica para poner a disposición estos equipos psicopedagógicos y no sacarse de la manga síndromes que salen mucho más baratos y con el que se corre el riesgo de poner en manos de maltratadores a menores, violando con ello sus derechos. La constatación de un solo caso debería ser suficiente.
O se pone remedio para detectar y abordar, que el sistema cuente de dispositivos capaces de detectar causas e intervenir sobre ellas, o se seguirá corriendo el riesgo de otorgar custodias a padres pedófilos o violentos.
Un padre pedófilo va a pelear por su hijo o su hija, cueste lo que cueste, y si hay un síndrome al que puedan agarrarse, pues mucho mejor.
La mujer que fomenta la aversión hacia el padre existe, el padre que fomenta la aversión sobre la madre existe, pero si el vínculo con los hijos es sano, por mucho que uno u otro progenitor diga, el vínculo está ahí. Se sufre, se sufre mucho ante estas situaciones, pero el vínculo se mantiene.
Lo que no es de recibo es que se niegue toda credibilidad al relato de los menores, que se minimice la angustia y el miedo, que en una observación de apenas 30 minutos se diagnostique síndrome de alienación parental, y en algunos casos incluso sin haber visto a los niños o a la madre.
Mujeres del Partido Popular, esta moción va a salir adelante porque somos mayoría los que estamos de acuerdo con ella, pero de verdad, como compañeras que son en cuanto a que sufrimos la misma desigualdad de género, les ruego que lean el informe de la Asociación Española de Neuropsiquiatría, que lean sobre el inventor del falso síndrome, que lean también el informe de “Save del Children” al respecto, que visiten la página de la Asociación Infancia Libre, que se hagan cargo de su condición de mujer, que averigüen cuántos hombres condenados por maltrato forman parte de la multitud de asociaciones de padres que se han creado en los últimos años, y que defienden el SAP porque este síndrome els salva y les protege, la diferencia está en que el sistema les proteja o no.
La asociación SOS PAPA, califica a la ley contra la violencia de género de “injusta, corrupta, nazi y desigual” defiende y hace congresos sobre el Síndrome de Alienación Parental, ya lleva cinco. La Asociación Projusticia, ASEMIP, Asociación Nacional de Afectados del Sindrome de Alienación Parental, Asociación Renuka y otras tantas locales que reclaman sentencias de custodia en base a este falso diagnóstico o custodias compartidas impuestas, esconden entre sus asociados hombres neomachistas y hombres maltratadores. Por favor, investiguen, y voten a favor de esta propuesta.
Espero y confío en que nuestra argumentaciones las hayan convencido y, en que voten a favor, que no se abstengan si quiera, que el ejemplo de este pleno sea un ejemplo. Lo contrario es ponerse de parte del machismo. No lo hagan, no sean tan torpes y posiciónense como la mujer merece.»