Miguel Ángel Ortega
24 de mayo de 2015. Elecciones municipales. Ese día en los municipios españoles se produjo un cambio de rumbo que marcará profunda y definitivamente el mapa político de nuestra patria.
Aquel día los principales ayuntamientos del Estado español pasaban a ser gobernados por candidaturas de unidad popular, forjadas al calor del ciclo de movilizaciones abierto el 15 de mayo de 2011. En Móstoles no pudo consumarse el cambio por la existencia de una candidatura fantasma, impulsada por un antiguo tránsfuga del PSOE, que denominándose Sí se Puede robó al pueblo de Móstoles más de cuatro mil votos que fueron decisivos, al arrebatarnos dos concejales y por ende la alcaldía de la ciudad.
Un año después toca hacer balance del camino recorrido. Han sido unos meses cargados de trabajo, algunas alegrías y muchos retos por delante.
En el apartado de los logros hay que subrayar uno incontestable: El haber desalojado del poder al Partido de la Corrupción y sus nefastas políticas. Sacarlos de sus poltronas ha significado poder abrir las ventanas y comenzar a limpiar la basura acumulada durante doce años de poder incontestable. En pocos meses veremos resultados en nuestra lucha contra la corrupción instalada como forma de gobierno, con nuevos casos presentados, gracias a Podemos, ante la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Madrid y con los resultados de la Comisión de Investigación que impulsó nuestro grupo municipal al comienzo de la legislatura.
Desalojar al Partido Popular del gobierno también ha supuesto cambiar las prioridades presupuestarias en nuestro municipio, volcando los recursos municipales para apoyar a las vecinas y vecinos que peor lo están pasando en nuestra ciudad. Ese éxito, compartido con el resto de fuerzas que conforman la actual mayoría, es incontestable. Se han multiplicado los recursos, se ha mejorado la atención, se han eliminado trabas para acceder a ayudas indispensables para poder sobrevivir, se ha hecho un gran esfuerzo por multiplicar y extender las becas escolares. Máxima satisfacción por lo logrado hasta ahora… pero nada de complacencia ya que todavía queda mucho por hacer y mucho por mejorar.
Pese a lo logrado, que es mucho, es mucho más lo pendiente.
Cofely, la gran empresa corruptora, sigue cobrando del Ayuntamiento de Móstoles. Creemos que no se ha hecho lo suficiente por rescindir un contrato como este, que pesa como una losa sobre nuestro municipio. Un contrato viciado de absoluta ilegalidad y que supone una afrenta a nuestra ciudadanía, ya que cada día que pasa es un día más de fraude que soportan las mostoleñas y mostoleños.
No se ha realizado la auditoria de las cuentas municipales a la que nos comprometimos tres de los grupos municipales, y es imprescindible saber qué es lo que ha ocurrido durante los últimos años con los contratos de este ayuntamiento. Somos conscientes de que se han cometido graves irregularidades en gran parte de la gestión municipal y es nuestra obligación indagarlas. Aún estamos a tiempo de corregir este incumplimiento, pero para ello es preciso un compromiso serio que no se ha producido hasta el momento.
Gran parte de las redes clientelares generadas durante doce años de poder absoluto del Partido Popular siguen intactas. Sin desmontar las redes de favores creadas en el seno de la plantilla municipal es sumamente difícil acometer cambios de envergadura en las políticas municipales, ya que permanentemente se choca con personas en puestos clave que no tienen ningún interés en que nada cambie. Falta valentía para romper con una administración anquilosada, lenta e ineficiente, lo que, unido a una falta crónica de personal derivada de los recortes impuestos por el gobierno central, resulta en una parálisis asfixiante en la acción institucional.
Pese a todo, nuestra ilusión y determinación continúan intactas y, por ello, ahora nos planteamos como una necesidad el conformar un nuevo gobierno en el que participe Ganar Móstoles. Un nuevo gobierno que impulse muchos de los compromisos aún no desarrollados, que apueste valientemente por el rescate de los servicios públicos privatizados, por limpiar toda la podredumbre dejada en herencia por el Partido Popular, por seguir avanzando en hacer las cosas mejor con menos, destinando los recursos públicos a lo que es realmente importante: a mejorar la vida de todas nuestras vecinas y vecinos.
Esta apuesta solo será posible si el Cambio se articula en todos los niveles de gobierno; por ello ahora toca volcar todos los esfuerzos en ganar las próximas elecciones generales para la gente, para cambiar, de una vez por todas, las políticas austericidas y los recortes de derechos y libertades.
El momento es ahora. Unid@s PODEMOS.